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10 recetas para cocinar en un camping gas

Hay multitud de deliciosas recetas camping gas exquisitas que puedes planificar y disfrutar durante tus salidas con tu camping gas. La versatilidad de tu hornillo te brinda la libertad de explorar diversas opciones culinarias, desde platos sencillos hasta creaciones más elaboradas. Al tener la comida bien guardada y lista para transportar, podrás aprovechar al máximo la experiencia gastronómica en entornos al aire libre.

chris curry L43P2HP RbE unsplash - campinggastop.com

Dependiendo del tipo de hornillo que elijas llevar contigo, las posibilidades culinarias pueden ampliarse. Por ejemplo, si optas por un hornillo de gas mini, podrías preparar comidas rápidas y prácticas, ideales para excursiones de un día. En cambio, si decides llevar un hornillo con mayor potencia y capacidad, como por ejemplo uno simple, doble o triple) podrías aventurarte a cocinar platos más elaborados, como guisos, pasta o incluso postres al aire libre.

10 recetas para cocinar con tu hornillo portátil camping gas

  1. Albóndigas en salsa de tomate.
    Una receta tradicional de la cocina mediterránea que se hace con:
    • Carne picada, pan rallado, huevo, ajo, perejil, sal, pimienta, harina, aceite de oliva, tomate, cebolla, zanahoria, laurel, orégano y vino blanco.
    • En un bol, mezcla la carne picada, el pan rallado, el huevo, el ajo picado, el perejil picado, sal y pimienta. Amasa bien y forma bolitas con la mezcla. Pasa las albóndigas por harina y fríelas en una sartén con aceite de oliva hasta que estén doradas. Reserva. En una olla, sofríe la cebolla y la zanahoria picadas con un poco de aceite de oliva hasta que estén blandas. Añade el tomate triturado, el laurel, el orégano, sal, pimienta y vino blanco. Cocina a fuego medio durante unos 20 minutos, hasta que la salsa espese. Añade las albóndigas y cocina unos 10 minutos más, hasta que estén tiernas. Sirve caliente con pan o arroz.

  1. Brochetas de pollo y verduras.
    Una receta fácil y colorida que se hace con:
    • Pechuga de pollo, pimiento verde, pimiento rojo, cebolla, calabacín, champiñones, aceite de oliva, zumo de limón, ajo, perejil, sal, pimienta y palillos de madera.
    • Corta la pechuga de pollo en trozos medianos y ponlos en un bol. Añade el aceite de oliva, el zumo de limón, el ajo picado, el perejil picado, sal y pimienta. Mezcla bien y deja marinar en la nevera durante al menos una hora. Corta el pimiento verde, el pimiento rojo, la cebolla y el calabacín en trozos del mismo tamaño que el pollo. Limpia los champiñones y quítales el tallo. Ensarta en los palillos de madera el pollo y las verduras alternando los colores. Calienta una plancha o una sartén y cocina las brochetas por todos los lados hasta que estén hechas. Sirve caliente o fría con salsa de yogur o de mostaza.

  1. Salmón al papillote con verduras.
    Una receta sana y ligera que se hace con:
    • Salmón, zanahoria, calabacín, puerro, limón, eneldo, aceite de oliva, sal y pimienta.
    • Corta cuatro trozos de papel de aluminio y engrásalos con un poco de aceite de oliva. Coloca sobre cada trozo de papel una rodaja de salmón. Salpimienta al gusto. Corta la zanahoria, el calabacín y el puerro en juliana y repártelos sobre el salmón. Exprime el zumo de un limón y rocía sobre las verduras. Espolvorea el eneldo picado por encima. Cierra los paquetes de papel de aluminio y ponlos en una bandeja de horno. Hornea durante unos 20 minutos o hasta que el salmón esté hecho. Sirve caliente con el jugo que haya soltado el papillote.

  1. Salchichas al vino blanco.
    Una receta rápida y sabrosa que se hace con:
    • Salchichas, vino blanco, ajo, laurel, tomillo, aceite de oliva, sal y pimienta.
    • Pincha las salchichas con un tenedor y fríelas en una sartén con un poco de aceite de oliva hasta que estén doradas. Añade el vino blanco, el ajo picado, el laurel, el tomillo, sal y pimienta. Tapa la sartén y cocina a fuego medio durante unos 15 minutos, hasta que el vino se reduzca y las salchichas estén tiernas. Sirve caliente con pan o patatas fritas.

  1. Ensalada de quinoa y garbanzos.
    una ensalada saludable y proteica que se hace con:
    • Quinoa, garbanzos, espinacas, zanahoria, pepino, cebolla morada, cilantro, limón, aceite de oliva, sal y pimienta.
    • Cuece la quinoa en agua hirviendo con sal siguiendo las instrucciones del paquete. Escurre y deja enfriar. Escurre los garbanzos y ponlos en un bol grande. Añade la quinoa y mezcla bien. Lava y seca las espinacas y córtalas en trozos pequeños. Pela y ralla la zanahoria. Corta el pepino y la cebolla morada en dados pequeños. Pica el cilantro. Añade todo al bol y mezcla bien. Exprime el zumo de un limón y aliña la ensalada con aceite de oliva, sal, pimienta y el zumo de limón. Mezcla bien y sirve fría o a temperatura ambiente.

Ensalada de quinoa y garbanzos - campinggastop.com

  1. Ensalada de pasta y atún.
    Una ensalada fría y completa que se hace con:
    • Pasta corta, atún, maíz, aceitunas, pepinillos, cebolla, pimiento, tomate, aceite de oliva, vinagre, sal y perejil.
    • Cuece la pasta en agua hirviendo con sal hasta que esté al dente. Escurre y enfría bajo el chorro de agua. Escurre el atún, el maíz y las aceitunas y ponlos en un bol grande. Pica los pepinillos, la cebolla, el pimiento y el tomate y añádelos al bol. Añade la pasta y mezcla bien. Aliña con aceite de oliva, vinagre, sal y perejil picado. Mezcla bien y refrigera hasta que esté fría.

  1. Tortilla de patatas con chorizo.
    Una receta típica de la cocina española que se hace con:
    • Patatas, huevos, chorizo, aceite de oliva, sal y perejil.
    • Pela y corta las patatas en trozos pequeños y fríelas en una sartén con aceite de oliva. Añade el chorizo cortado en rodajas y fríe un poco más. Bate los huevos en un bol y salpimienta al gusto. Añade el perejil picado y mezcla bien. Echa la mezcla de huevo sobre las patatas y el chorizo y cuaja la tortilla por ambos lados. Sirve caliente o fría.

  1. Macarrones con queso y beicon.
    Una receta clásica de la cocina americana que se hace con:
    • Macarrones, queso cheddar, beicon, leche, mantequilla, harina, sal y pimienta.
    • Cuece los macarrones en agua hirviendo con sal hasta que estén al dente. Escurre y reserva. Corta el bacon en trozos pequeños y fríelo en una sartén hasta que esté crujiente. Escurre el exceso de grasa y reserva. En una olla, derrite la mantequilla y añade la harina. Remueve bien y cocina a fuego bajo durante unos minutos. Añade la leche poco a poco, sin dejar de remover, hasta obtener una salsa bechamel. Añade el queso rallado y salpimienta al gusto. Mezcla bien hasta que el queso se derrita. Añade los macarrones y el bacon y mezcla bien. Sirve caliente o gratina en el horno si tienes uno.

  1. Crepes de chocolate y plátano.
    Un postre fácil y delicioso que se hace con:
    • Harina, huevos, leche, mantequilla, azúcar, chocolate, plátanos y nata montada.
    • En un bol, mezcla la harina, los huevos, la leche, una cucharada de mantequilla derretida y una pizca de sal. Bate bien hasta obtener una masa homogénea y sin grumos. Calienta una sartén antiadherente y engrásala con un poco de mantequilla. Vierte un cucharón de masa y extiéndela por toda la superficie. Cocina el crepe por ambos lados hasta que esté dorado. Repite el proceso hasta acabar con la masa. En un cazo, derrite el chocolate con un poco de leche y azúcar al gusto. Pela y corta los plátanos en rodajas. Rellena cada crepe con chocolate y plátano y dóblalo por la mitad. Sirve con nata montada por encima.

  1. Flan de huevo y leche condensada.
    Un postre cremoso y dulce que se hace con:
    • Huevos, leche condensada, leche, azúcar y vainilla.
    • En un cazo, pon el azúcar y un poco de agua y calienta a fuego medio hasta que se forme un caramelo dorado. Vierte el caramelo en un molde y repártelo por el fondo y los bordes. Reserva. En un bol, bate los huevos con un tenedor. Añade la leche condensada, la leche y la vainilla. Mezcla bien hasta obtener una crema homogénea. Vierte la crema en el molde sobre el caramelo. Cubre el molde con papel de aluminio y ponlo al baño maría en una olla con agua hirviendo. Cuece el flan durante unos 40 minutos o hasta que esté cuajado. Deja enfriar y desmolda con cuidado. Sirve frío o a temperatura ambiente.

Dada la diversidad de recetas disponibles, te ofrezco información relevante y útil para determinar qué alimentos son más apropiados para llevar y cuáles deberían ser considerados con precaución. De esta manera, tendrás una base informativa que te permitirá tomar decisiones más acertadas al planificar tus comidas al aire libre.

Alimentos para cocinar en un hornillo de gas

Alimentos que no se estropean con el calor

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  • Frutos secos: Constituyen una excelente opción, no requieren refrigeración y son una fuente concentrada de energía, ideal para mantener la vitalidad durante la actividad.
  • Frutas frescas: Manzanas, peras, uvas y otras frutas menos delicadas son óptimas, ya que resisten bien a las altas temperaturas, proporcionando frescura y sabor en cualquier momento.
  • Ensaladas: Las ensaladas, como las de pasta o arroz, son fáciles de transportar, constituyendo una alternativa ligera y nutritiva para evitar alimentos propensos a deteriorarse con el calor.
  • Conservas: Alimentos enlatados como atún, sardinas o vegetales en conserva son prácticos y duraderos, asegurando una alimentación conveniente durante la expedición.
  • Embutidos curados: Salchichón, chorizo y otros embutidos curados ofrecen una opción sabrosa y resistente a las altas temperaturas, añadiendo variedad al menú de campamento.

Alimentos que son más propensos a estropearse con el calor

Alimentos perecederos: Fiambres, carnes, pescados y ensaladas que requieren refrigeración constante para prevenir la proliferación de bacterias.

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Alimentos crudos: El calor puede acelerar la descomposición de alimentos crudos como el pollo, aumentando el riesgo de contaminación bacteriana.

Alimentos con huevo crudo: Salsas o postres que contienen huevo crudo pueden estropearse rápidamente con el calor, representando un riesgo para la salud.

Alimentos con cremas o natas: Postres que contienen cremas o natas pueden deteriorarse con el calor, afectando su seguridad alimentaria.

¿Cómo transportar los alimentos?

Para desplazarse con alimentos y prevenir su deterioro ante las altas temperaturas sin depender de la refrigeración, se disponen de diversos métodos de conservación:

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  • Envases herméticos: Estos recipientes desempeñan un papel esencial en la preservación de la frescura de tus alimentos al evitar la entrada de aire y prevenir la contaminación por olores externos. Su sellado hermético crea un entorno protegido que contribuye a mantener la calidad de los alimentos.
  • Bolsas térmicas: Ideales para prolongar la conservación de alimentos perecederos, las bolsas térmicas actúan como barrera contra las variaciones de temperatura. Su diseño aislante ayuda a mantener la temperatura interna, ofreciendo una solución efectiva para tus necesidades de almacenamiento durante períodos extendidos.
  • Bolsas de gel refrigerante: Al colocar las bolsas de gel refrigerante entre los alimentos en la nevera portátil, logras mantener una temperatura constante y baja. Este método asegura un entorno fresco que preserva la calidad de tus alimentos durante más tiempo.
  • Embalaje al vacío: La técnica de envasado al vacío elimina el aire alrededor de los alimentos, prolongando su durabilidad. Esta práctica resulta especialmente útil para acampar, donde la conservación eficiente es clave para disfrutar de comidas frescas y seguras.
  • Recipientes isotérmicos: Estos contenedores mantienen la temperatura de los alimentos, ya sea caliente o fría, por períodos más extensos. Su diseño isotérmico garantiza una conservación óptima, ofreciendo versatilidad para satisfacer tus necesidades alimenticias en diversas condiciones.